¿Estás pensando en independizarte? Ten en cuenta estas recomendaciones

Dejar el hogar es quizás unas de las decisiones más importantes de la vida, es iniciar una nueva etapa, donde tienes tu propio espacio y con ello más libertades, pero así mismo, adquieres mayores responsabilidades.  Vivir en la casa de la familia puede ser cómodo desde el punto de vista financiero, no gastas en arriendo y el dinero que gastas en comida y servicios suele ser repartido, pero al momento de tomar esta decisión e irte a un nuevo lugar, todo esto corre por tu cuenta. Por eso, te damos algunos consejos financieros para que puedas independizarte y no fallar en el intento. 

Antes de cualquier recomendación debes analizar si realmente estás preparado o no para dar este paso. Para ello será clave que respondas algunas preguntas y lo hagas antes de salir de tu casa y no cuando ya estés en el nuevo hogar: ¿Cuánto aportas mensualmente para los gastos del hogar actual? ¿Recibes aportes de tus padres para tus gastos personales? ¿Cuánto te sobra de tu sueldo y en qué lo gastas? ¿El salario que recibes te alcanza para costear un arriendo y demás gastos imprescindibles? ¿sabes cocinar y hacer los demás oficios del hogar?

Si al responder lo anterior, estás seguro de que sí estás listo para independizarte, ten en cuenta lo siguiente:

  • Intenta salir de deudas antes de dar el paso. Mientras estás en la casa de tu familia los gastos son menores, aprovecha ese momento para, en la medida de lo posible, salir de deudas y poder afrontar los nuevos gastos sin estar pensando en obligaciones del pasado.
  • Inicia un plan de ahorro previo. Antes de independizarte comienza a ahorrar, con ello podrás asumir algún gasto de última hora, que como no estaba previsto, puede comprometer otros gastos necesarios.
  • Crea un presupuesto y cúmplelo. Saber cuánto dinero recibes y cuánto gastas te permitirá no hacer gimnasia financiera a final de mes y te ahorrará muchos dolores de cabeza, podrás de esta forma ajustar tus gastos a los ingresos que tienes mensualmente y te servirá para priorizar entre necesidades y deseos.
  • Establece metas reales. Para que sea más fácil cumplir tus objetivos intenta que estos sean claros y tengan una fecha concreta, por ejemplo, “con el ahorro de tres meses comprar la lavadora”. De esta forma controlas tus gastos y puedes seguir ahorrando.
  • Considera compartir los gastos. Desde compartir el apartamento con un amigo, con la pareja o con un roommate hasta compartir el internet con el vecino, o el carro, con un compañero del trabajo que viva cerca tuyo. Este tipo de ahorro te permitirá tener mayor flujo financiero para los demás gastos.
  • Compara precios. No escojas el primer lugar que veas o te ofrezcan, compara los valores a pagar y las distancias entre tu vivienda y el lugar de estudio o de trabajo, entre otras, para tomar la mejor decisión.
  • Amoblar el hogar toma su tiempo. No te apresures comprando todos los muebles y elementos de tu hogar desde el primer momento, enfócate en las prioridades y mes a mes vas adquiriendo lo que haga falta.
  • Busca otras fuentes de ingreso. Si además de tu trabajo puedes buscar la forma de obtener ingresos extra, al menos por los primeros meses, puedes estar preparado para asumir cualquier eventualidad o darle celeridad al proceso de compra de elementos para tu hogar.
  • Aprende a hacer los oficios básicos. Preparar los alimentos en casa, arreglar algunos muebles o hacer el aseo, todo por ti mismo, puede ahorrarte dinero y, de esta manera, podrás darle otro uso.

Manejar correctamente tus finanzas será determinante para que esta experiencia no se convierta en un pesadilla. No tiene por qué asustarte, con responsabilidad aprenderás a ser independiente.