¿Cómo hacer de tu hogar un lugar ecoamigable?

La conciencia ecológica dejó de ser una tendencia para convertirse en una necesidad. Basta con mirar las consecuencias del cambio climático hoy, para entender que es indispensable cambiar algunos hábitos y ser más responsables con nuestro entorno si queremos pensar en un mañana. Un estilo de vida sostenible o ecoamigable no solo beneficia al medio ambiente, también, genera grandes impactos en la economía del hogar.

Hacer de tu casa un lugar ecológico es posible, no significa necesariamente que el techo de tu casa esté cubierto de paneles solares o diseñadas con complejos sistemas de eficiencia energética (aunque sí cuenta), depende de la forma de consumir y de vivir.  Estos son algunas acciones sencillas que te permitirán transitar hacia un modelo más circular y convertir tu hogar en un espacio ecoamigable.

  • Limita el consumo de productos de un solo uso. Usar y tirar parece normal, pero no lo es, lo correcto es reutilizar siempre que sea posible.
  • Prioriza la luz natural. Ventanas y puertas son buenas fuentes de iluminación y mantienen una buena temperatura dentro de tu casa. Para este último objetivo, también funciona elegir tonos claros para las paredes del hogar.
  • Reduce el consumo de energía. Siempre puedes consumir menos y en este caso también, cambia los bombillos tradicionales por LED o de bajo consumo, al salir de una habitación apaga la luz, aquellos electrodomésticos que dejes de usar apágalos y cargadores que ya terminaste de utilizar, desenchúfalos.
  • Controla el gasto de agua. Implementa mecanismos para reutilizar el agua que desperdicias. Cierra la llave durante el baño, el lavado de dientes o a la hora de lavar los platos. Instala ahorradores de agua y/o cambia tu ducha por una que tenga un flujo ligero de agua.
  • No caigas en el juego de la obsolescencia programada. Cada vez los artefactos se dañan o se rompen más rápido y no se pueden reparar o hacerlo sale muy costoso, incluso más que comprar un producto nuevo. El camino aquí, nuevamente, es preguntarse cuánto, en verdad, necesitas este tipo de utensilios.
  • Decora con plantas el interior de la casa. Estas mejoran la calidad del aire, es como tener un pulmón en el rincón de tu hogar. El espacio debe ser luminoso, pero sin luz directa para que sean más efectivas. Incluso puedes crear paredes verdes.
  • ¿Lo puedes volver a usar antes de botarlo? Si la respuesta es no, sepáralo, ubica el vidrio, cartón, plástico y papel en lugares diferentes y llévalos a un centro de reciclaje, de ser posible.
  • El aceite que usas, no lo botes. El aceite puede llegar a ser muy contaminante, salvarás muchos litros de agua si lo recoges, acumulas y lo llevas a un punto para reciclarlo, varias empresas ya trabajan en esta tarea.
  • Evita los envases pequeños. Para el medio ambiente y para el bolsillo resulta mejor comprar a lo grande, dado que los envases pequeños generan más residuos y en proporción resulta más caro comprarlos.
  • Conoce lo que consumes. La trazabilidad es un aspecto clave de la sostenibilidad, saber de dónde viene, cómo se hizo y su impacto hará que quieras mantener el producto en este nuevo estilo de vida que llevas o no.

Todo cambio empieza desde casa y con pequeñas acciones. No se necesita reconstruir tu hogar ni realizar grandes inversiones, solo adáptalo y cambia algunos hábitos con los que seguro mejorarás tu calidad de vida y tu entorno.